El intenso frío del invierno afgano tiene a niños pequeños acurrucados bajo mantas en campamentos improvisados. Los bebés enfermos en los hospitales yacen envueltos en las burkas envolventes de sus madres. Las largas filas en los centros de distribución de alimentos se han vuelto abrumadoras a medida que Afganistán se hunde cada vez más en tiempos desesperados.
Desde la caótica toma de Kabul por los talibanes el 15 de agosto, una economía ya devastada por la guerra que alguna vez se mantuvo viva gracias únicamente a donaciones internacionales está ahora al borde del colapso. No hay suficiente dinero para los hospitales.
Saliha, que como muchos afganos usa un solo nombre, llevó a su hijo pequeño al Hospital Infantil Indira Gandhi en la capital, Kabul. Najeeb, de 4 meses de edad, débil y frágil, estaba gravemente desnutrido.
La Organización Mundial de la Salud advierte sobre millones de niños que sufren desnutrición, y las Naciones Unidas dicen que el 97% de los afganos pronto vivirán por debajo del umbral de la pobreza.
Para millones de personas que viven en campamentos para desplazados o que se sientan fuera de los ministerios del gobierno en busca de ayuda, la única fuente de calor es acurrucarse alrededor de fogatas abiertas de leña.
Casi el 80% del presupuesto del gobierno anterior de Afganistán provino de la comunidad internacional. Ese dinero, ahora cortado, financió hospitales, escuelas, fábricas y ministerios gubernamentales. En el Afganistán de los talibanes no hay dinero. Las sanciones han paralizado a los bancos mientras la ONU, los Estados Unidos y otros luchan por encontrar la manera de hacer llegar cientos de millones de dólares de ayuda humanitaria a los afganos sin pasar por alto a los talibanes, incluso cuando no hay señales inmediatas de la corrupción generalizada que caracterizó a las anteriores administraciones.
Para muchos de los más pobres de Afganistán, el pan es su único alimento básico. Las mujeres hacen fila frente a las panaderías de la ciudad, los niños pequeños llegan antes del amanecer para comprar pan. La mayoría lucha por encontrar comida y combustible. Las estadísticas proporcionadas por la ONU son sombrías: casi 24 millones de personas en Afganistán, alrededor del 60% de la población, padecen hambre aguda. Hasta 8,7 millones de afganos están lidiando con la hambruna.
La escuela para niñas bajo los talibanes es irregular y en muchas provincias no se les permite asistir a la escuela después del sexto grado, pero en más de 10 provincias las escuelas están abiertas. La comunidad internacional está trabajando en formas de ayudar a las escuelas que están abiertas mientras anima a los talibanes a abrir el resto.
En algunas áreas, como la provincia occidental de Herat, los maestros y los padres engatusan a los líderes locales del Talibán para que abran escuelas. En escuelas como Tajrobawai Girls High School en Herat, está dando sus frutos.
Hace meses, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados advirtió sobre un éxodo masivo de afganos si se permitía que Afganistán cayera libremente en un abismo económico.
El éxodo ya ha comenzado cuando miles de personas salen de Afganistán hacia Irán en desesperación. Por cientos, empacan autobuses que los llevan desde Herat a la cercana provincia de Nimroz, desde donde hacen el peligroso viaje hacia Irán. Algunos esperan ir más lejos, a Turquía y, finalmente, a Europa, a pesar de la creciente determinación de Europa de mantener fuera a los inmigrantes.
(con información de AP)
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México ha entregado a EEUU a 55 líderes de cárteles de droga en operaciones secretas durante el 2025
El operativo incluyó sigilo extremo, drones de vigilancia y sustitución de personal penitenciario. Las autoridades temían fugas, atentados y motines de último minuto
En una de las operaciones conjuntas más ambiciosas entre México y EstadosUnidos, 55 líderes de cártelesmexicanos fueron entregados este año a la justicia estadounidense en dos misiones bajo estrictas medidas de seguridad. La acción, resultado de una presión diplomática ejercida principalmente por la administración de Donald Trump, representa un golpe a las estructurascriminales y un giro en la cooperación bilateral frente al tráficodedrogas.
De acuerdo con información publicada por The Wall Street Journal (WSJ), los reos trasladados representan las cúpulas de organizaciones como Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y Zetas. Entre los extraditados figuran nombres emblemáticos como Rafael Caro Quintero, acusado del asesinato del agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en 1985 y prófugo de la justicia estadounidense por décadas.
Durante sus estancias en prisiones de México, estos reclusos contaban con redes de corrupción que les permitían acceso a armas, drogas, mujeres y dispositivostelefónicos. Según funcionarios estadounidenses y mexicanos, desde sus celdas coordinaban el envío de toneladas de heroína, fentanilo, cocaína y metanfetamina hacia EstadosUnidos, además de ordenar homicidios y secuestros.
El proceso de extradición se mantuvo en completo sigilo ante el temor de fugas, motines y posibles atentados contra los propios capos, quienes representaban riesgos de filtración de información sensible. “Nunca en la historia de nuestra agencia hemos visto la remoción de este nivel de criminales desde México”, señaló Derek Maltz, exjefe interino de la Administración de Control de Drogas (DEA).
La transferencia de los líderescriminales requirió la movilización de 2.000 efectivos de fuerzas especiales mexicanas. “Fue una misión que no podía fallar. Cualquier filtración habría encendido alarmas y disparado la violencia”, aseguró un alto funcionario mexicano al WSJ.
El nivel de secreto fue tal que los propios detenidos desconocían su destino hasta pisar territorio estadounidense. “Welcome to America!”, exclamó Maltz al recibir al primer grupo de extraditados. Los raslados se ejecutaron en dos bloques: la primera hace nueve meses y la segunda en agosto. Los prisioneros desembarcaron en ciudades como Chicago, Phoenix, San Antonio, Nueva York y Washington D.C..
Entre los extraditados sobresalen los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño, antiguos jefes de Los Zetas, organización responsable de una oleada de violencia. Conforme a fuentes oficiales mexicanas, los Treviño controlaban desde prisión una red de más de 600 internos y han sido vinculados al asesinato de 18 custodios penitenciarios.
Nicolás Maduro recurre a custodios cubanos y se esconde en múltiples lugares ante el temor de un ataque de Estados Unidos
El dictador chavista ha cambiado su rutina, teléfonos y lugares de descanso, y ha delegado responsabilidades clave de su protección en agentes de inteligencia de La Habana
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha reforzado de manera significativa su seguridad personal, incluyendo el cambio de lugar donde duerme, y ha recurrido a Cuba, su principal aliado, ante la creciente amenaza de una intervención militar estadounidense en el país.
Así lo confirman varias personas cercanas al gobierno venezolano. Describen un clima de tensión y preocupación dentro del entorno íntimo del mandatario, aunque aseguran que Maduro considera que mantiene el control y que podrá superar este desafío, el más grave en sus 12 años de gobierno.
Para protegerse de un posible ataque de precisión o de una incursión de fuerzas especiales, Maduro ha cambiado repetidamente de lugar para dormir y de teléfono celular, según dichas fuentes. Estas precauciones se intensificaron desde septiembre, cuando Estados Unidos empezó a acumular buques de guerra y a atacar embarcaciones que la administración de Trump afirma que traficaban drogas desde Venezuela.
Para reducir el riesgo de ser traicionado, Maduro también ha ampliado el papel de los guardaespaldas cubanos en su equipo de seguridad personal y ha incorporado más oficiales de contrainteligencia cubanos al ejército venezolano, indicó una de las fuentes.
Sin embargo, en público, Maduro ha intentado minimizar las amenazas de Washington, mostrándose relajado y despreocupado, haciéndose presente en actos públicos sin previo aviso, bailando y publicando videos propagandísticos en TikTok.
Las siete personas cercanas al gobierno entrevistadas para este artículo pidieron el anonimato por temor a represalias o porque no estaban autorizadas a hablar con la prensa. El Ministerio de Comunicación de Venezuela, responsable de las consultas de medios, no respondió a la solicitud de comentarios sobre el artículo.
La administración Trump ha acusado a Maduro de liderar un “cártel narcoterrorista” que inunda a Estados Unidos de drogas, una narrativa que, según muchos funcionarios actuales y anteriores en Washington, busca en última instancia un cambio de régimen. Sin embargo, Trump ha combinado esas amenazas con menciones a una posible solución diplomática. Él y Maduro conversaron por teléfono el mes pasado para discutir una posible reunión.