El proyecto también contempla la utilización de la inteligencia artificial para gestionar el flujo de tráfico en tiempo real sin necesidad de cambiar la infraestructura física actual
La innovación en el campo de los vehículos autónomos podría traer cambios significativos en las normativas de tráfico, incluyendo la introducción de una cuarta luz de tráfico de color blanco o, incluso, eliminar la necesidad de señales de tráfico por completo.
Investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte y de la Universidad de Michigan están explorando las posibilidades de esta nueva era de movilidad que podría estar más cerca de lo que pensamos, según información suministrada por FOX News.
El profesor asociado de ingeniería Ali Hajbabaie, de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, junto a Henry Liu, profesor de ingeniería civil en la Universidad de Michigan, se encuentran al frente de estas investigaciones.
Los avances de la IA podrían acelerar la adaptación vial a los vehículos autónomos. (REUTERS/Elijah Nouvelage)
Hajbabaieimagina un escenario donde, además de las luces roja, amarilla y verde ya conocidas, se introduciría una luz blanca indicando que el control de la intersección está en manos de los vehículos autónomos. “Cuando llegamos a la intersección, nos detenemos si es rojo, y avanzamos si es verde”, explicó Hajbabaie a The Associated Press (AP), “pero si la luz blanca está activa, simplemente sigues al vehículo que tienes enfrente”.
Por otro lado, Liu opina que los cambios podrían implementarse antes de lo previsto, tomando en cuenta el acelerado progreso de la inteligencia artificial. “El ritmo de progreso de la inteligencia artificial es muy rápido, y creo que está llegando”, señaló a la AP.
Esta visión se sustenta en parte gracias a una subvención otorgada por el Departamento de Transporte de Estados Unidos, bajo la ley de infraestructura bipartidista, destinada a probar cambios en los semáforos en tiempo real utilizando datos de velocidad y ubicación provenientes de los automóviles.
La mayoría de los semáforos no consideran el flujo de tráfico actual, señalando una necesidad de modernización. (Rob Schumacher/USA Today Network/REUTERS)
La universidad lidera un programa piloto en el suburbio de Detroit, Birmingham, donde los semáforos actualmente operan en un temporizador fijo sin hacer ajustes según el flujo de tráfico. “La belleza de esto es que no tienes que hacer nada a la infraestructura”, destacó Liu, añadiendo que, “Los datos no provienen de la infraestructura. Vienen de las compañías de automóviles”.
Este enfoque innovador resalta uno de los desafíos importantes a nivel nacional: más de la mitad de los semáforos no tienen en cuenta la congestión o el tráfico más liviano de lo normal, como en medio de la noche, lo que requiere que las ciudades realicen mejoras complejas y costosas para monitorear el tráfico de manera más eficiente.
La historia de las señales de tráfico ha evolucionado poco desde su primera aparición en Cleveland en 1914, con la introducción inicial de luces rojas y verdes, y más tarde, el color amarillo. De esta manera, este potencial cambio representa una de las innovaciones más significativas en más de un siglo.
Mientras tanto, aunque los vehículos completamente autónomos aún no están disponibles comercialmente, empresas como Tesla, Mercedes, GM, Ford, junto con Waymo, el servicio de viaje compartido autónomo propiedad de la compañía matriz de Google, Alphabet, están cerrando la brecha hacia esta nueva realidad.
Sandy Karp, portavoz de Waymo, enfatizó la importancia de considerar diversas perspectivas y soluciones en esta etapa temprana del desarrollo de los vehículos autónomos, advirtiendo sobre la precipitación en inversiones específicas para estos vehículos que podrían resultar prematuras o incluso innecesarias.
Karp remarcó que sus automóviles ya operan sin una cuarta luz en ciudades seleccionadas como Los Ángeles, Phoenix, Austin, Texas y San Francisco, demostrando la viabilidad de sistemas alternativos de tráfico adaptados a los vehículos autónomos.
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El 30 de julio de 2025, la península de Kamchatka fue epicentro de un terremoto de magnitud 8.8, el más potente registrado en el mundo desde el devastador sismo de Tohoku (Japón) en 2011. El evento generó alertas de tsunami en Japón, EE.UU., Rusia y otras regiones del Pacífico, aunque no se reportaron víctimas mortales en tierra firme.
Detalles del sismo
Hora local: 11:24 a.m.
Epicentro: a 130 km de la costa oriental rusa, con una profundidad de 20 km, lo que lo convierte en un sismo superficial con alto potencial de tsunami.
Ciudad cercana: Petropavlovsk-Kamchatski, con 180.000 habitantes, permanece en alerta por réplicas superiores a magnitud 7.
Contexto geológico
Según expertos del CSIC y la Universidad de Salamanca, el terremoto ocurrió en la zona de subducción entre la placa del Pacífico y la microplaca de Ojotsk, una de las regiones sísmicas más activas del planeta. Se estima que este tipo de eventos ocurren cada 75 a 100 años, como los registrados en 1737, 1841 y 1952 (este último con más de 2.300 muertos).
Comparación histórica
Este sismo empata en magnitud con el de Biobío/Maule (Chile, 2010) y el de Ecuador-Colombia (1906), ocupando el sexto lugar en el ranking global desde 1900. Solo lo superan los de Valdivia (1960), Alaska (1964), Sumatra (2004) y Tohoku (2011).
Impacto y estimaciones
El sismólogo John Townend estima un deslizamiento de más de 10 metros en un área de 150 x 400 km.
Se liberó 30 veces más energía que el terremoto de Kaikura (2016) y tres veces menos que el de Tohoku.
Las réplicas podrían continuar durante 3 a 5 días, según geólogos.
Ante los recientes debates sobre la posible eliminación del derecho de ciudadanía por nacimiento en Estados Unidos, han surgido alternativas migratorias que podrían ganar protagonismo, especialmente entre familias extranjeras con alto poder adquisitivo. Dos opciones destacan: la visa EB-5 y la propuesta de una Gold Card, ambas basadas en inversión económica.
Contexto migratorio actual
El panorama migratorio en EE.UU. se ha vuelto más complejo en los últimos meses.
La práctica conocida como “turismo de nacimiento”, que permite obtener ciudadanía para hijos nacidos en territorio estadounidense, podría quedar sin efecto si se modifica la ley.
Esto ha impulsado el interés por vías legales y seguras para obtener residencia permanente.
¿Qué es la visa EB-5?
Permite obtener la Green Card mediante una inversión mínima de 800.000 dólares en una empresa estadounidense.
La empresa debe generar al menos 10 empleos.
Beneficia al inversionista, su cónyuge e hijos menores de 21 años.
¿Qué propone la Gold Card?
Esquema propuesto por la administración estadounidense en febrero de 2025.
Requiere una inversión de 5 millones de dólares.
Ofrece residencia permanente con un sistema de imposición territorial, es decir, solo se pagan impuestos por ingresos generados dentro de EE.UU.
Está dirigida a individuos de alto patrimonio que buscan estabilidad migratoria.
Obstáculos políticos y legales
Expertos como Morgan Bailey advierten que no hay consenso en el Congreso para aprobar estos programas.
Existen preocupaciones sobre seguridad nacional, lavado de dinero y la percepción pública de “comprar la residencia”.
Si se implementa sin respaldo legislativo, la Gold Card podría enfrentar desafíos judiciales.