Hallazgo clave sobre el sistema inmune: el Nobel de Medicina premió los estudios sobre las células T reguladoras
Los estadounidenses Mary E. Brunkow, Fred Ramsdell y el japonés Shimon Sakaguchi fueron distinguidos por su investigación sobre la tolerancia inmunitaria periférica. El avance abre vías para nuevos tratamientos contra el cáncer y las enfermedades autoinmunes
La Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Suecia anunció que los estadounidenses Mary E. Brunkow, Fred Ramsdell y el japonés Shimon Sakaguchi fueron distinguidos con el Premio Nobel de Medicina 2025 por sus descubrimientos sobre la tolerancia inmunitaria periférica y las células T reguladoras, un mecanismo que permite al sistema inmunológico regularse y distinguir entre amenazas externas y los propios tejidos del cuerpo.
El comité del Nobelsubrayó la trascendencia de este avance: “Sus hallazgos han sentado las bases de un nuevo campo de investigación e impulsado el desarrollo de nuevos tratamientos, por ejemplo, para el cáncer y las enfermedades autoinmunes”.
“La comprensión de este mecanismo ayuda a explicar por qué la mayoría de las personas no desarrolla enfermedades autoinmunes graves”, según palabras de Olle Kämpe, presidente del Comité.
Mary E. Brunkow nació en 1961 y es doctora en Filosofía por la Universidad de Princeton, se desempeña como gerente de programa senior en el Instituto de Biología de Sistemas en Seattle. Fred Ramsdell nació en 1960, doctorado por la Universidad de California en Los Ángeles, es asesor científico en Sonoma Biotherapeutics, San Francisco.
Shimon Sakaguchi, nació en 1951, doctor en Medicina y en Filosofía por la Universidad de Kioto, ocupa el cargo de profesor distinguido en el Centro de Investigación Fronteriza en Inmunología de la Universidad de Osaka. Los tres compartirán a partes iguales el monto de 11 millones de coronas suecas asociadas al galardón.
Qué es la tolerancia inmunitaria periférica y las células T reguladoras
La tolerancia inmunitaria periférica es el mecanismo por el cual el sistema inmunitario evita que las defensas del organismo ataquen a sus propios tejidos.
Según el jurado, los premiados “identificaron a los guardianes de seguridad del sistema inmunitario, las células T reguladoras, sentando así las bases para un nuevo campo de investigación”.
Durante décadas, la pregunta sobre cómo el cuerpo evita que sus propias defensas lo destruyan no tuvo una respuesta precisa. Los estudios premiados demostraron que el sistema inmunitario conserva un equilibrio mediante las células T reguladoras —un subgrupo de linfocitos—, responsables de suprimir las respuestas contra los tejidos propios.
Los científicos detallaron que la tolerancia inmunitaria cuenta con dos capas: una eliminando linfocitos autorreactivos durante la formación en el timo (tolerancia central) y otra, más sofisticada, regulando las defensas en la periferia de los tejidos mediante estas células especializadas. Antes de estas investigaciones, la existencia y función crítica de este segundo mecanismo permanecía en discusión, una laguna que las investigaciones a de los galardonados consiguió resolver.
Antes de estos descubrimientos, se creía que la protección frente a ataques autoinmunes dependía únicamente de la eliminación de células T dañinas en el timo, mecanismo denominado tolerancia central. Sin embargo, el trabajo de Brunkow, Ramsdell y Sakaguchi demostró que existe un sistema adicional de control fuera del timo, esencial para mantener el equilibrio inmunológico.